Según personas involucradas, Ucrania está pidiendo voluntarios a la comunidad de hackers del país. Con el fin de proteger y llevar a cabo misiones de ciberespionaje contra las tropas rusas.
En un ciberataque de 2015, ampliamente atribuido a hackers estatales rusos, 225.000 ucranianos se quedaron sin electricidad.
Según los investigadores de la empresa de ciberseguridad ESET, el miércoles se descubrió una pieza de software destructivo que circulaba por Ucrania y que afectó a cientos de ordenadores. Sin duda, las sospechas recayeron sobre Rusia, que ha sido acusada en repetidas ocasiones de realizar hackeos contra Ucrania y otros países. Entre las víctimas se encontraban organismos gubernamentales y una institución financiera, según informó previamente Reuters.
Por otro lado, un funcionario de seguridad ucraniano dijo a principios de este mes que el país no contaba con una fuerza militar cibernética específica.
Ante la invasión por parte de las fuerzas militares rusas, el jueves por la mañana comenzaron a aparecer solicitudes de voluntarios en los foros de hackers.
A través de un post se le decía a la Cibercomunidad ucraniana que era hora de participar en la ciberdefensa del país. Del mismo modo, se pedía a los hackers y a los expertos en ciberseguridad que presentaran una solicitud a través de Google Docs, enumerando sus especialidades, como el desarrollo de malware, y sus referencias profesionales.
El cofundador de una empresa de ciberseguridad en Kiev, Yegor Aushev dijo a Reuters que escribió el post a petición de un alto funcionario del Ministerio de Defensa. El cual se puso en contacto con él el jueves.
La empresa de Aushev, Cyber Unit Technologies, es conocida por trabajar con el gobierno de Ucrania en la defensa de infraestructuras críticas.
Aushev dijo que los voluntarios se dividirían en unidades cibernéticas defensivas y ofensivas. La unidad defensiva se emplearía para defender infraestructuras como centrales eléctricas y sistemas de agua.
La unidad ofensiva de voluntarios que Aushev dijo estar organizando ayudaría al ejército ucraniano a realizar operaciones de espionaje digital contra las fuerzas rusas invasoras.
Aushev dijo que ya había recibido cientos de solicitantes y que iba a empezar a investigar para asegurarse de que ninguno de ellos era agente ruso.
Otra persona directamente involucrada en el esfuerzo confirmó que la solicitud provino del Ministerio de Defensa el jueves por la mañana.
Los representantes del Ministerio de Defensa ucraniano no respondieron a una solicitud de comentarios.
Un agregado de defensa en la embajada de Ucrania en Washington dijo que “no puede confirmar o negar la información de los canales de Telegram”, en referencia a la plataforma de mensajería móvil, y declinó hacer más comentarios.